Rusia acusa a Ucrania de usar bombas de racimo en Klimovo

El gobernador de la región de Bryansk, Alexander Bogomaz, acusó este martes a las fuerzas armaddas de Ucrania de utilizar  bombas de racimo en una aldea rusa cerca de la frontera con Ucrania, alcanzando varias casas.

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 "Las Fuerzas Armadas de Ucrania dispararon municiones de racimo contra la aldea de Klimovo. Según la información preliminar, no hubo víctimas", indicó Bogomaz.

"Se registraron daños en varios edificios residenciales y construcciones anexas", publicó el gobernador de la región, en su canal oficial de Telegram.

En Klimovo no se registraron víctimas, escribió el gobernador Alexander Bogomaz en Telegram. Kiev no se ha pronunciado sobre esta acusación. 

Washington suministró a Kiev bombas de racimo en julio, lo que fue criticado como un "terrible error" por políticos y grupos de derechos humanos. 

Las municiones en racimo están prohibidas en virtud de un tratado internacional firmado por más de 120 países. 

Las bombas de racimo son artefactos explosivos que esparcen submuniciones más pequeñas en un área amplia, que pueden alcanzar múltiples objetivos o causar daños indiscriminados a civiles.

Como una escopeta, disparan submuniciones explosivas sobre un área del tamaño de varios campos de fútbol. Estos pueden luego permanecer inactivos como minas terrestres, matando y mutilando a civiles años después de que haya terminado un conflicto.

Estados Unidos, que no es signatario de la Convención sobre Municiones en Racimo de 2008 que prohíbe el uso de tales armas, sigue proporcionado a Ucrania municiones en racimo como parte de su paquete de ayuda militar. 

Ucrania ha comenzado a utilizar municiones en su contraofensiva contra Rusia, afirmando que son efectivas y apropiadas.