El sondeo de opinión reveló que el 82 por ciento de los brasileños respaldaron la intervención decretada por Lula da Silva tras la intentona golpista.
Más del 90 por ciento de los brasileños condenan los actos violentos protagonizados por simpatizantes del exmandatario Jair Bolsonaro en la capital del país suramericano el pasado fin de semana.
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Según una encuesta publicada el miércoles por el Instituto Datafolha, el 93 por ciento de los brasileños se pronunciaron en contra de las acciones violentas de bolsonoristas y apoyaron las medidas tomadas por el presidente, Luiz Inácio Lula da Silva.
El sondeo de opinión reveló que el 82 por ciento de los consultados respaldaron la intervención decretada por Lula da Silva para retirarle las funciones en lo concerniente a la seguridad pública al gobernador de Brasilia, Ibaneis Rocha, aliado del expresidente.
Datafolha: Ataque bolsonarista é condenado por 93% - 11/01/2023 - Poder - Folha https://t.co/sgQxiWVIY0
— Emir Sader (@emirsader) January 11, 2023
Horas después, el gobernador Rocha fue separado del cargo durante noventa días por orden del Supremo Tribunal Federal, la máxima corte judicial del país.
A pesar del rechazo casi unánime a los actos y del respaldo mayoritario a las medidas tomadas por el actual presidente brasileño, un 39 por ciento de los encuestados juzgó que Lula da Silva hizo lo que estuvo a su alcance para un posible golpe de Estado.
�� A VOZ DO POVO
— Camarote da República (@camarotedacpi) January 12, 2023
Segundo o Datafolha, 93% da população brasileira repudia os ataques golpistas ao coração dos três Poderes em Brasília.
Enquanto isso, 3% se diz favorável a ela; 2% é indiferente e 1% não foi capaz de opinar.
El pasado domingo, miles de simpatizantes del expresidente Bolsonaro asaltaron y tomaron la sede del Gobierno, el Palacio de Planalto y las sedes del Congreso y de la Corte Suprema de Brasil.
Los actos antidemocráticos con fines golpistas pedían la intervención militar para derrocar a Lula una semana después de asumir el poder el pasado 1 de enero tras vencer en la segunda vuelta electoral del 30 de octubre a Jair Bolsonaro.
Las acciones vandálicas y violentas en Brasilia, fueron condenadas y rechazadas por la Gobiernos, entes y organismos internacionales.