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Considera el asalto a la Embajada mexicana en Quito, el secuestro de Jorge Glas y el maltrato al personal diplomático graves violaciones al derecho internacional.
La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) repudió este sábado el asalto por fuerzas de seguridad de la Embajada de México en Ecuador y el secuestro del exvicepresidente ecuatoriano Jorge Glas, ordenados por el Gobierno de Daniel Noboa luego de que aquel recibiera asilo diplomático por la persecución política y judicial de que es víctima.
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A través de un comunicado, el bloque integracionista denunció que el "insólito allanamiento de la Embajada (..) así como el secuestro del exvicepresidente Jorge Glas, protegido legalmente (....) mediante el derecho al asilo político, y el maltrato de todo el personal diplomático mexicano, conforman graves violaciones al Derecho Internacional sin precedentes".
El ALBA-TCP calificó estas acciones de discrecionales e ilegales. Aseveró que "constituyen una flagrante violación a la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, a la Convención sobre Derecho de Asilo y a la soberanía de México, las cuales deben ser rechazadas por los países civilizados del mundo entero".
Los Estados miembros del @ALBATCP consideran que los insólitos hechos ocurridos en la embajada mexicana en Quito, constituyen una flagrante violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas, la Convención sobre Derecho de Asilo y la soberanía de México. Son… pic.twitter.com/I6SrA9tOhS
— Jorge Arreaza M (@jaarreaza) April 6, 2024
Por otro lado, cuestionó que "un Gobierno de nuestra región actúe de esa manera quebrantando la soberanía de los países hermanos, la paz y la seguridad de nuestra América Latina y el Caribe".
Recordó que en esta región "nació y se consolidó la figura del asilo político como un aporte invalorable al derecho internacional público y donde firmamos la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz".
Luego de condenar tan grave falta, el ALBA-TCP declaró su total solidaridad al Gobierno mexicano. Asimismo, denunció el intento de suplantar el orden internacional basado en el estricto respeto a la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional (...) por un orden fundamentado en reglas arbitrarias, diseñas a conveniencia a la medida de cada actor".
