Presidente Putin defiende operación militar de Rusia en Ucrania

El presidente de Rusia, Vladimir Putin, aseguró este martes que “el sistema del mundo bipolar empezó a romperse tras el colapso de la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas (URSS), parecía que la base para el enfrentamiento con Occidente había desaparecido, pero no ha sido así”, indicó el mandatario que defendió la ofensiva militar en Ucrania.

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Durante una visita a una fábrica de Ulan-Udé (capital de la república rusa de Buriatia), Putin aseveró, además, que la presión sobre Rusia empezó tras el colapso de la URSS y que para socavar la estabilidad en el país euroasiático, fueron creados "la quinta columna" y grupos terroristas, incluso en el Cáucaso Norte.

El mandatario ruso explicó también que el nacionalismo en Ucrania ha sido alimentado durante mucho tiempo desde Occidente y que “durante ocho años, Rusia intentó persuadir a sus socios para resolver pacíficamente la situación en Donbás, pero el país fue engañado”.

"Para nosotros, esta es una lucha por nuestro pueblo que vive en estos territorios. Somos un país multinacional. Pero sigue siendo el mundo ruso. Son como nosotros. Son parte de nosotros, ¿cómo se les puede dejar atrás?", añadió Putin.

En relación a la operación militar especial en Ucrania, el presidente de Rusia destacó que si para Occidente es una cuestión de mejoramiento del estado geopolítico, para Rusia es una lucha por la sobrevivencia.

Asimismo, Vladimir Putin hizo un llamamiento a la consolidación y cohesión de la sociedad que conducirán a la victoria y destacó que las bases de la estabilidad rusa son mucho más fuertes de lo que cualquiera pensó.

En ese sentido, explicó que Rusia ha multiplicado su soberanía económica y el país no se ha hundido, como esperaban los adversarios de Occidente.

"Contaban con que los negocios se detendrían porque nuestros socios se negarían a trabajar con nosotros en el terreno económico. El sistema financiero se hundiría. Miles de personas, decenas de miles se quedarían sin trabajo, saldrían a la calle, protestarían. Rusia se vería sacudida desde dentro y se derrumbaría. Ese era el cálculo", aseguró.