La central atómica ha estado en el centro de los combates y tensiones en los últimos días en el conflicto ucraniano.
Rusia confirmó este lunes que un artefacto aéreos no tripulado fue derribado cuando presuntamente intentaba una misión suicida sobre la planta atómica de Zaporiyia, en Ucrania.
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De acuerdo con el Ministerio de Defensa de Rusia, el derribo de uno de los drones se produjo cuando fue alcanzado por el fuego de la artillería rusa mientras se aproximaba al complejo electroenergético.
En particular, Rusia apuntó que el artefacto aéreo se dirigía a un depósito de almacenamiento de combustible nuclear de fabricación estadounidense, así como residuos radiactivos.
La cartera de Defensa puntualizó que el dron cayó sobre el techo del complejo de almacenamiento sin dejar heridos ni causar destrucciones graves.
Asimismo, Rusia ratificó que el personal sigue vigilando el estado técnico de la planta y velando por la estabilidad de su funcionamiento.
En esa misma dirección, ratificaron su denuncia de ataques de la artillería ucraniana contra la ciudad de Energodar, ubicada en las cercanías de la central electronuclear. Señalaron, en ese sentido, que el Ejército ucraniano, lanzó ocho proyectiles de gran calibre contra los barrios residenciales, los cuales habrían dejado al menos siete heridos.
Se estima que estos disparos fueron hechos con obuses estadounidenses M777, desde posiciones de tiro situadas en la ciudad de Níkopol, situada al oeste de la planta atómica.
En esta misma jornada se conoció que una delegación de la Agencia Internacional de Energía Atómica viaja hacia la central Zaporiyia con el fin de crear condiciones para disminuir la tensión en la zona.