El Programa Mundial de Alimentos advirtió que las importaciones constituye un riego frente a la actual crisis económica mundial.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) dio a conocer este miércoles que unos 4,5 millones de haitianos se encuentran en situación de inseguridad alimentaria.
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El representante del PMA en Haití, Pierre Honnorat, señaló a través de videoconferencia que "según los datos de nuestro último informe, 4,5 millones de haitianos (45 por ciento de la población total) están en situación de inseguridad alimentaria, de los cuales, 1,5 millones necesitan ayuda urgente".
El funcionario del programa mundial apuntó que la dependencia del país caribeño a las importaciones coloca a los haitianos en una posición desfavorable, en un contexto matizado por la agudización de la crisis económica mundial.
“We need both an emergency response and to engage strongly in development activity to build resilience.” @WFP Country Director for Haiti @PierreHonnorat following the latest @theIPCinfo release #savinglives #changinglives https://t.co/AKUDSZFALR
— WFP Haiti (PAM) ��️ (@WFP_Haiti) March 23, 2022
En este sentido, Pierre Honnorat afirmó que: "El setenta por ciento de los productos del mercado son importados, entre ellos productos básicos como el arroz, importando en su 80 por ciento".
De igual forma, el PMA argumentó en su sitio web que: “Los niveles de hambre están aumentando sin cesar a medida que la inestabilidad política persistente, la inflación creciente y los desastres recurrentes continúan conspirando contra el pueblo de Haití”.
Food crisis in Haiti ��
— WFP Haiti (PAM) ��️ (@WFP_Haiti) March 22, 2022
Humanitarian assistance has managed to avert a catastrophe. Political and economic crises coupled with frequent disasters keep hunger on the rise.
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Por su parte, Honnorat aseguró que Haití integra un “anillo de fuego” afectado por las crisis climáticas, los conflictos internos, la pandemia, por lo que “el aumento de los costos están empujando a las comunidades vulnerables al límite”.
La situación económica de Haití ha experimentado una severa inflación, lo cual ha debilitado el valor de la moneda nacional e incrementado notablemente los precios. A su vez, este escenario ha provocado un crecimiento en la ocurrencia de actos delictivos y una vertiginosa ola migratoria.