Palestina condena violencia de soldados y colonos israelíes

La Autoridad Nacional Palestina (ANP) condenó este martes las acciones violentas perpetradas por soldados y colonos israelíes contra las poblaciones civiles en los territorios ocupados de Cisjordania y Jerusalén Este, y alertó sobre las consecuencias del incremento de estos incidentes en los últimos meses.

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Por medio de un comunicado, el portavoz de la Presidencia de la ANP, Nabil Abu Rudeina, responsabilizó al Ejército israelí y los colonos extremistas de ataques contra ciudades, campamentos de refugiados y aldeas como Hawara, Beita y Surra, en el distrito norteño de Nablús, que han dejado como saldo decenas de heridos.

"Hacemos un llamamiento a la comunidad internacional y al Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) para que intervengan urgentemente a fin de proporcionar protección internacional al pueblo palestino", solicitó Abu Rudeineh.

A la vez, el portavoz gubernamental precisó que el Ejército de Israel aprovecha el silencio internacional para recrudecer sus crímenes y agresiones contra Palestina, y hace de todo ello un tema de campaña en el proceso eleccionario israelí.

Asimismo, Abu Rudeineh advirtió del peligro que supone la convocatoria de los extremistas judíos a asaltar la Explanada de las Mezquitas, llamada por los judíos Monte del Templo, y profanarla el próximo jueves, durante la celebración de una festividad judía.

“Los lugares sagrados islámicos y cristianos son una línea roja, y no permitiremos que se les haga ningún daño. Si este Gobierno israelí quiere detener la peligrosa escalada que se está produciendo en los territorios palestinos, debe poner fin a sus crímenes y a los ataques de los colonos”, subrayó.

En este sentido, el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) solicitó actuar de inmediato para detener las acciones violentas contra los civiles y prevenir que empeore la situación en los territorios ocupados de Cisjordania y Jerusalén Este.

“Es inaceptable que los civiles resulten heridos o mueran en estos episodios de violencia. Es muy preocupante que niños que se encuentran en escuelas cercanas presencien este nivel de violencia y que demasiado a menudo sean víctimas de la misma”, refirió el líder de la subdelegación del ente en Cisjordania, Arnaud Meffre.

Meffre instó a adoptar medidas para proteger a la población civil, y aseguró que el uso de la fuerza, en todas sus manifestaciones, debe hacerse en correspondencia con las normativas del Derecho Internacional.

Por su parte, un informe presentado en el pasado mes de enero por el Centro de Información Israelí para los Derechos Humanos en los Territorios Ocupados (B’Tselem), advirtió que la violencia de los colonos mediante agresiones físicas, amenazas, daños a los cultivos, bloqueo de viales, entre otras formas, constituye un mecanismo que emplea Israel para afianzar su control en los territorios ocupados.

Datos oficiales indican que al menos 490.000 colonos israelíes habitan en Cisjordania, y otros 200.000 viven en Jerusalén Este desde el conflicto bélico de 1967.