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Se conoce que 4.600.000 niños viven en las 10 provincias turcas afectadas y más de 2.500.000 en el noroeste sirio.

Se conoce que 4.600.000 niños viven en las 10 provincias turcas afectadas y más de 2.500.000 en el noroeste sirio. | Foto: EFE

Publicado 14 febrero 2023



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La cifra de muertos entre ambos países supera los 35.000 y se estima que un número importante pueden ser menores de edad.

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia de la Organización de Naciones Unidas (Unicef), alertó este martes que, tras los sismos de gran magnitud que afectaron a Türkiye y Siria, más de siete millones de niños sirios y turcos resultaron afectados y necesitan con urgencia ayuda humanitaria.

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Una semana después de los terremotos y las más de 1.600 réplicas, Unicef ponderó la necesidad de ayudar a los infantes de Türkiye y Siria que, a pesar de que las cifras de los damnificados son imprecisas, se sabe que 4.600.000 viven en las 10 provincias turcas afectadas y más de 2.500.000 en el noroeste sirio.

 “Los niños, las niñas y las familias de Türkiye y Siria se enfrentan a unas penurias inimaginables tras estos devastadores terremotos”, expresó la directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell, quien añadió que es obligatorio garantizar que todos los supervivientes reciban el apoyo y la ayuda necesaria, sobre todo los infantes.

“Debemos hacer todo lo que esté en nuestras manos para garantizar que todas las personas que han sobrevivido a esta catástrofe reciban ayuda de emergencia, en particular agua potable y saneamiento, suministros esenciales de salud y nutrición y apoyo para la salud mental de los niños y las niñas. Y no sólo ahora, sino también a largo plazo”, apuntó.

Muchas familias han perdido sus hogares y se encuentran en refugios provisionales, se destruyeron escuelas, centros de atención especializados para los niños y otras infraestructuras de servicios básicos.

Asimismo, la cifra de fallecidos entre ambos países supera los 35.000 y aunque el número es incierto aún, se estima que un número importante de estos pueden ser menores de edad.

El ente internacional para los derechos de los infantes asegura que continúa trabajando para atender la emergencia de los afectados, mientras los equipos en el campo laboran para suministrar productos sanitarios básicos, mantas, ropa, agua potable y demás.

No obstante, Unicef reconoce que las necesidades y los retos son numerosos y complejos, debido a la destrucción de infraestructuras como carreteras y centros hospitalarios, y a que mucho personal y equipos de primeros auxilios de organizaciones aliadas han muerto o se encuentran heridos o desplazados, mientras que sus medios han sufrido daños.


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