Se enfrentan palestinos y soldados israelíes en Jerusalén

Las fuerzas israelíes entraron en el  complejo de la mezquita de Al-Aqsa junto con cientos de nacionalistas judíos a quienes se les permitió acceder al recinto en el llamado "Día de Jerusalén", cuando los israelíes celebran el aniversario de la ocupación de Jerusalén Este.

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Las tropas lanzaron este domingo gases lacrimógenos y detuvieron a varios palestinos que asistían a las oraciones después de que estallaron las protestas en el complejo de la mezquita tras el anuncio de que nacionalista judíos entrarían en el lugar sagrado.

Unos 1.200 nacionalistas acudieron al lugar, según el director de la mezquita de Al Aqsa. La policía, que normalmente prohíbe la entrada a judíos a la explanada durante los diez últimos días del ramadán, esta vez les permitió excepcionalmente el ingreso.

Ello provocó la cólera de los fieles palestinos, que se encerraron en la mezquita de Al Aqsa, desde donde lanzaron piedras y sillas contra las fuerzas de seguridad, antes de ser dispersados, informaron las autoridades.

Según el director de la mezquita Al Aqsa, Omar Kaswani, 45 personas resultaron heridas, una de ellas gravemente, y siete fueron detenidas.

En la tarde de este domingo se espera que decenas de miles de jóvenes ultraderechistas israelíes celebren el "Baile de las banderas" para conmemorar la toma de la parte oriental de la urbe marchando por el barrio musulmán de la Ciudad Vieja.

El Día de Jerusalén marca para los judíos la reunificación de la ciudad hace 52 años y para el resto del mundo supuso el comienzo de la ocupación israelí sobre la parte oriental de la urbe tres veces santa, que los palestinos reclaman como capital de su futuro Estado.

La Explanada de las mezquitas, tercer lugar santo del islam, y considerado al mismo tiempo por los judíos como lugar sagrado, se encuentra en Jerusalén Este, parte palestina de la ciudad ocupada desde 1967 por Israel, que luego fue anexada.

Las fuerzas israelíes controlan todos sus accesos e ingresan en ella en caso de disturbios.
Esta es la primera vez en aproximadamente 30 años que a los judíos se les permitió ingresar al sitio durante los últimos días del mes de ayuno del Ramadán, que coincidió este año con el feriado nacional israelí que conmemora el control de la ciudad  al final de la guerra árabe-israelí de 1967.

En la mañana, la policía israelí había desplegado cientos de sus fuerzas alrededor del complejo de la mezquita y por toda la ciudad mientras cientos de hebreos esperaban en las puertas del compuesto para entrar.

El complejo de la mezquita de Al-Aqsa, conocido como el Monte del Templo por los judíos,  siempre ha estado cerrada a los nacionalistas hebreos durante los últimos 10 días de Ramadán, cuando un gran número de fieles musulmanes permanecen en el sitio.

La última vez que el Día de Jerusalén coincidió con el final de Ramadán en 1988, el complejo de la Mezquita de Al-Aqsa se cerró a los judíos.

El movimiento islamista Hamás, que gobierna en la Franja de Gaza, condenó los incidentes en la Explanada de las Mezquitas, consideró "los ataques de la ocupación israelí" como "una violación de la santidad de la religión islámica" y advirtió de que "tendrán sus consecuencias".

El ministerio de Exteriores de Jordania condenó también este domingo las "prácticas provocadoras" de Israel en la mezquita al Aqsa, en el sector ocupado de Jerusalén, durante las últimas horas.

El ministerio jordano difundió un comunicado en el que condena "las violaciones más obvias contra al Haram al Sharif (Explanada de las Mezquitas) mediante la infiltración de extremistas protegidos por la policía israelí y los ataques contra fieles (musulmanes) y funcionarios del Awqaf", la institución musulmana que tiene a su cargo el mantenimiento de la Explanada de las Mezquitas.