Conmoción en Argentina por asesinato de una joven en plena calle

Una joven de 21 años resultó asesinada a puñaladas a manos de su exnovio, de 33 años, en el centro de Villa La Angostura, una turística ciudad de la Patagonia argentina (extremo sur), trascendió este miércoles.

LEA TAMBIÉN: 

Argentina reafirma postura por la justicia social ante la ONU

Se trata de un nuevo femicidio que reaviva el hartazgo, la conmoción y los reclamos contra las violencias hacia las mujeres en el país sudamericano y ocurre una semana después de las marchas multitudinarias que hubo en el país por el caso de Úrsula Bahillo, la joven de 18 años, quien fue asesinada, también a puñaladas, por su pareja, un policía con un abultado historial de denuncias que esta semana recibió una condena por otra causa de violencia de género.

La divulgación de los detalles del femicidio de Bahillo provocaron una oleada de protestas, con las cuales denuncian la impunidad con la que actúan los asesinos.

La joven recién asesinada en Villa La Angostura, quien era madre de una niña de un año de edad, ya había denunciado a su exnovio, lo cual derivó en una orden de restricción para que no se le pudiera acercar, pero ello no impidió que el martes por la noche él la acosara en una popular avenida transitada por pobladores y turistas.

Con arreglo con las declaraciones de los testigos, la víctima se bajó de un auto y cuando vio que el femicida la estaba esperando comenzó a correr por la calle pidiendo ayuda, mientras él la perseguía armado con un cuchillo. En definitiva, la alcanzó y la mató. Aunque algunas personas intentaron ayudarla, Quintriqueo las amenazó también con el arma.

Ya a la noche, cientos de personas protestaron frente a la Comisaría local para exigir justicia, pero las marchas continuarán este miércoles y durante la semana, mientras que el asesino, quien logró ser detenido, se encuentra hospitalizado con heridas leves y ahora tendrá que enfrentar un juicio.

En Argentina, en lo que va de 2021, se han producido unos 47 asesinatos de mujeres, lo cual se traduce en una mujer asesinada cada 29 horas. Y las cifras no han cambiado de manera significativa desde que los femicidios comenzaron a contarse como tales de manera oficial.