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Adriana Salvatierra renunció a su cargo luego del golpe de Estado contra el presidente Evo Morales.

Adriana Salvatierra renunció a su cargo luego del golpe de Estado contra el presidente Evo Morales. | Foto: @SenadoBolivia

Publicado 29 noviembre 2019



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La expresidenta del Senado de Bolivia denunció la persecución política desatada en la nación, que impide la celebración de elecciones justas. 

La expresidenta del Senado de Bolivia Adriana Salvatierra aseveró este viernes, en entrevista para teleSUR, que en su país no existen garantías democráticas para celebrar un nuevo proceso electoral tras el golpe de Estado.

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La dirigente del Movimiento al Socialismo (MAS) aseguró que siguen las detenciones arbitrarias de los que se oponen a la afrenta antidemocrática consumada el pasado 10 de noviembre contra el Gobierno de Evo Morales.

“Demandamos garantías para que el presidente Evo Morales pueda acompañar la campaña electoral”, aseveró Salvatierra en referencia al mandatario asilado en México, quien ha sido demandado penalmente por supuestamente promover bloqueos de vías y manifestaciones populares en la país.

Contra Morales pesan acusaciones por varios delitos, entre ellos terrorismo, y una notificación azul de Interpol, que pretende recoger información sobre el líder indígena en el marco de la denunciada persecución judicial.

Asimismo, señaló que a esta falta de garantías se suma la falta de procesos penales contra los que provocaron la muerte de 33 personas en medio de la represión.

“Existe una administración que asumió tras el golpe que ha causado muerte y represión”, sentenció la exparlamantaria boliviana.  

Salvatierra también cuestionó que la administración golpista posicionada el poder en Bolivia tome decisiones económicas y de política exteriores.

“Un gobierno de transición no debería tomar medidas de economía ni de temas de política exterior”, dijo en referencia a la restauración de las relaciones de Bolivia con Estados Unidas y la orden de salida de representaciones diplomáticas como las de Cuba y Venezuela.

Por otra parte, advirtió que la junta golpista, encabezada por la senadora Jeanine Áñez, autoproclamada presidenta interina, ha comenzado una campaña para desmerecer la imagen de las empresas del Estado y, de esta manera, avanzar hacia las privatizaciones.


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